Tengo un cartel en la cara que dice: "Gremio de la medicina, venga aquí y ríase de mí".
Y no es nada divertido, al menos para mí. En serio.
La médica sustituta llega veinte minutos tarde. Atiende a un señor en cuarenta segundos y pasa la chica que va antes que yo. Que está dentro de la consulta veinticinco minutos. El Chico Cósmico y yo intentamos echar cuentas de si a mí me ha atendido tanto tiempo mi psiquiatra, sumando todas las consultas en año y medio. Concluimos que es muy posible que no.
Cuando por fin entro, la doctora ni siquiera me invita a sentarme, cortesía que me tomo por mi propio pie inmovilizado. Le saco la hoja de Urgencias del Hospital de Castellón y me pregunta si quiero la baja.
- No, si no trabajo.
- ¿Necesitas Ibuprofeno?
- Tengo una caja, gracias.
- ¿Y entonces, para qué has venido?
- O_o En la hoja [Inciso: hoja que ella acaba de leer en voz alta, incluyendo la frase a continuación] indica que hoy debía revisarme el médico de atención primaria.
- ¿Y qué quieres que te revise?
- O_O El pie...
- Ya. ¿Y para qué?
- O_O, pues supongo que para quitarme el vendaje y decirme si puedo andar.
- ¿Andar? No, no, andar no. Yo misma tengo un esguince que se me está hinchando porque sí que tengo que trabajar. Los esguinces son quince días, siempre.
- Pues me dijeron en el hospital que cinco. No sé, quizá tampoco sea un esguince, o sí, pero no sea para tanto... Sin verlo... (ejem).
- No, no, no. Si no tienes que trabajar, no tienes que andar: el pie en alto quince días.
- ¿No vas a mirármelo?
- ¿Para qué?
- [Sensación de dejà-vu...] No sé, al menos para cambiar el vendaje.
- ¿Está sucio?
- (Suspiro)
- Si está sucio, te lo cambio.
- Está dado de sí.
- Ah.
Se va y llama a una enfermera a la consulta de al lado. La enfermera le dice que me haga un volante para la sala de curas. Yo me voy del ambulatorio echando espuma por la boca, y el Chico Cósmico se para en una farmacia a comprar Voltarén y una venda elástica. En pleno ataque de autocompasión llamo a mi madre con intención de pedir asilo político con enfermera 24 horas. Mi madre dice que tengo que dejar de cabrearme con los médicos, y que me vaya mañana a que me vean por el seguro. Yo me oigo gritar como desde lejos, algo sobre pagar impuestos y pagar un seguro por duplicado y no conseguir que ningún médico me atienda. Debo de estar asustándola, porque me cuelga y me dice que hablamos mañana.
Me liaba a tiros ahora mismo. Lo raro es que no pasen más cosas...
Saturday night (lirirarará)
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En medio de la fiesta, inicio de un larguísimo atardecer, se me acerca una
chica a la que no conozco de nada y me dice: "Eres muy simpático, me caes
muy...
Hace 3 años