En la mesa de centro junto al café una espada de Minecraft, una cerveza y un "refresquito" de limón que las cosas pendientes no dejaron que nos acabáramos.
En el pecho, en el estómago, las ausencias.
Lo que debería haber pensado: fíjate qué fácil es cuando no es absurdamente retorcido, grotescamente autocentrado, negligentemente cruel.
Lo que pensé: era esto, sencillamente esto... pero contigo.
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